Del déficit de atención o el exceso de vanidad

Quién hubiese podido esperar, que un ser tan inocente....

Pudiese portar una camiseta TAN perversa...?

"S W A L L O W S"... ¬¬

Pudiese ganar mucho dinero si me parase con ella en una esquina, en los sitios bajos del centro de alguna gran metrópoli.

Eso me pasa por no leer las letras en la ropa que compro! Jamás hubiéseme dado cuenta...

Quien abrióme los ojos, si no recuerdo mal, fue el Gabo (o el Arut?; no, el Gabo), cuando preguntóme en octubre, estando yo de vacaciones en Hermosillo: "Podías haberte comprado una camiseta más gay?"

No puedo evocar con certidumbre sus graznidos (el Gabo siempre ha graznado, rebusnado, y hecho otro tipo de ruidos, pero jamás ha hablado) pero ciertamente fue una pregunta que sugería inquirir, más directa que indirectamente, si hacíale honor al lema evidentemente sexual de la camiseta...

Pasóme algo parecido -en el sentido de no tener ni la más mínima idea de qué carajos dice la camiseta que traigo puesta-, con una camiseta azul rey del equipo de fútbol italiano:

Mientras trabajaba durante mi primera lab rotation, Bal (versión corta para algún asqueroso nombre indio, ridículamente largo) preguntóme si era fan de "fulanito" (un futbolista cuyo nombre ya no recuerdo, "Del-Pierro" o algo así), a lo que, como todo buen ciudadano al que le interesa cualquier cosa excepto el fútbol, respondí:

"Eh? Quién es ese?" y él

"El futbolista cuya camiseta portas..." y yo

"Ah, sí? Mi camiseta tiene el nombre de un futbolista atrás? Je! es bueno saberlo".

El presente post estaría más completo con una foto del anverso de tal camiseta..., empero (hase vuelto mi palabara predilecta) estoy en Hermosillo y no la traje conmigo y jamás ocurrióseme tomarle foto desde ese ángulo; tengo, sin embargo, miles de fotos desde un ángulo frontal:

Por cierto, sha para cerrar, nada catastrófico aconteció en la escuela (pese a que no escondí la computadora, como hícelo con el violín). Los milagros sí existen. PERO, debo dejar de atenerme a ellos. No es muy agradable el estrés de pensar que vas a reprobar una materia, por tener n-mil páginas que leer sobre un tema que te es totalmente ajeno y presentar el único examen habiendo leído poco más de la mitad UNA vez la noche anterior.
DEBO convertirme en un ñoño, por el bien de mi salud, y de mi preparación.